Variedad histórica de la Argentina, su reciente revalorización la puso en un lugar por momentos incómodo: si bien ahora se la considera capaz de dar lugar a vinos de calidad, su precio resulta la mayoría de las veces exagerado. De ahí que aplaudimos de pie que la bodega sanjuanina Callia lance una Criolla chica a un precio súper accesible ($5900).
“Con este lanzamiento buscamos reconectar a los consumidores con una parte esencial de nuestra historia vitivinícola a través de un vino con gran intensidad y frescura y con un paso ligero, alineado con las tendencias actuales de consumo -comentó Araceli Cristian, Brand Manager de Bodegas Callia-. La historia de la uva Criolla fue nuestra gran fuente de inspiración para este lanzamiento. Queremos compartir cómo esta cepa acompañó momentos clave de la historia de nuestro país.”
El arte de su etiqueta sintetiza la apuesta de Callia, con un diseño moderno pero que remite en su ilustración al vínculo del vino con la argentinidad. La uva, por su parte, proviene de viñedos antiguos ubicados en el Valle de Tulum, San Juan, pertenecientes a la familia Rufrano, que cultiva viñas desde hace casi un siglo.
Vinificado con un Pinot Noir, Callia Criolla 2024 es un vino ágil, directo, de buena frescura. Aromas y sabores van por el lado de la fruta roja, sin pretención pero con precisión, dando lugar a un tinto muy fácil de beber y muy versátil a la hora del maridaje. Conviene beberlo un toque fresco, para que se exprese mejor.
Su graduación alcohólica es de 12,5%.
