Mucha personalidad hay en el primer blend tinto de la bodega Puerta del Abra. Establecida en el particular paisaje serrano de Balcarce, provincia de Buenos Aires, produce un puñado de etiquetas que han comenzado a cosechar buenos puntajes y reconocimientos internacionales. Ahora, con Itzae, se animan al mundo de los blends.
Itzae significa en lengua maya “regalo de Dios” y es Delfina Pontaroli, enóloga de la bodega, quien explica el por qué del nombre: “Cada vino es único, influido por las condiciones climáticas, las personas involucradas y la singularidad de la uva. Con Itzae, aspiramos a descubrir el equilibrio perfecto entre todos estos elementos. Más allá de las variedades, las proporciones y la composición, nos enfocarnos en la narrativa que la naturaleza tiene para compartirnos. Año a año, lanzaremos la mejor expresión de nuestros blends. Itzae I marca el inicio de un nuevo recorrido en Bodega Puerta del Abra”.
La etiqueta de Itzae I no indica el año de cosecha, tampoco su composición. La única precisión es que el vino pasó 24 meses en barricas de distintos usos y que se trata de una edición limitada de algo más de 5200 botellas. Y que año tras año irán apareciendo sucesivas ediciones (II, III, y así).
De estilo bordelés, este corte tinto es un vino de color rojo casi negro, con aromas de fruta negra, entre los que pueden identificar algunas notas herbales y a cuero. En boca es fluido, de taninos bajos, muy amables, y buena frescura. La madera está muy bien integrada y sobresale apenas con algunas notas de tabaco. Su graduación alcohólica es de 14%.